miércoles, agosto 06, 2008

La Isabel



Ella es mi suministradora de pescado veraniega. Es todo un portento de marketing que ha generado una marca triunfadora que transmite calidad y confianza. Ella es la número uno, la que vende más pescado a pesar de ser más caro que en el resto de los puestos del mercado.

Su sede comercial es como un santuario, con las paredes repletas de vírgenes dolientes y de Cristos Nazarenos. Sus parroquianos acuden como en procesión, formando una pequeña aglomeración en su pescadería. Ella atiende con rapidez y trato personalizado. No discute con ningún cliente porque sabe que el tiempo es oro. Utiliza técnicas comerciales tradicionales como redondear las cuentas o regalar algunas piezas de marisco según corresponda al gasto que se haga. Para diferenciar su servicio tiene una persona que limpia el pescado.

Ella habla con voz alta y clara, sentando cátedra. Por ejemplo, si le pides almejas entre semana te dirá: "Las almejas sólo se traen el fin de semana, si ve hoy alguna almeja en este mercado sepa que no son auténticas y que si las pone en el arroz y le sale alguna negra, se le echará a perder y lo tendrá que tirar". O si preguntas si hay coquinas responderá: "Las coquinas tienen toxinas, cuando vea en este puesto que se venden coquinas, entonces podrá comprarlas en cualquier puesto porque se podrán comer". En el caso de pedirle nieve(1) para transportar el pescado, ella decidirá en qué estado de frialdad se traslada el pescado: "Yo tengo dos cajas de nieve para ti, pero para las sardinas y el atún que te llevas no te hace falta ". Ella es la ISO-BEL de los pescados (esto va por AlyCie ).

Los lunes es la única pescadería que abre en el mercado. Allí se pueden encontrar lenguados, acedías y langostinos. Este pescado se captura con la técnica del trasmallo que consiste en echar las redes en zona de ría por la noche y sacarlas por la mañana siguiente. Lo suelen practicar algunos pescadores jubilados para matar el gusanillo de la mar.

Todos los años me recibe con alegría cuando me dejo caer por su puesto en el mercado y me despide con tristeza cuando le digo que éste será el último pescado de Ayamonte del año. Me dice que soy muy buena clienta y yo le digo que ella es la mejor pescadera y que la echaré de menos. No sabe ella lo que me acuerdo en Madrid de sus robalos(1), sus rapes, su atún, sus sardinas, sus lenguados, sus acedías, sus chocos, sus carabineros, sus langostinos y sus gambas. Hasta siempre Isabel.

(1) Denominación local al hielo picado que hay en las pescaderías.
(2) Robalo es la denominación de la lubina en Huelva

¡¡Ni me menees!!

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Gracias por el guiño, Lula.
La seña Isabel, tiene para mí mas respetos que las ISOs, las ENs y las UNEs.

Antonio dijo...

Has vuelto y está todo el pescao vendido, darling. Qué pena que queden tan pocos cristianos. Saludos a la Dueña, que yo prefiero Calvo;-)

Bom patetit!

Antonio dijo...

Y no te preocupesx+), que mi mujer lo prepara bien, bien, bien.

Joseph Cartaphilus dijo...

Coño que hambre me ha dado

Que rico todo. Vivan las tenderas pelin tiranas

Dichosos pescados y todas sus inagotables formas de prepararlo

Lula Towanda dijo...

AlyCie Mil veces mejor la Isabel que el AENOR. La experiencia es un grado y algunas normas parece que las hacen los becarios depués de una noche de juerga. Si el mundo funciona es una clara señal de que Dios existe.

Am ¿ya te ha dado de nuevo el ataque de caspa y has borrado el blog? :-(
Ni comparación el calvo con lo que vende la Isabel.
Bájate pa Huelva que te pilla cerca y verás lo que es pescado bueno. Si vas a la Isabel di que vas de mi parte.

Joseph Cartaphilus He colocado la imagen a todo tamaño para que las ganas de comer sean mayores. Espero que desde tu isla desierta puedas llegar a la costa de Hueva.