sábado, marzo 25, 2006

Símbolos de mujer

Desde que los humanos hacemos vida social hemos estado rodeados de símbolos. Los símbolos tienen una enorme carga de contenido y por sí mismos expresan algo que no cabría en un "paper" que se presenta a un congreso. Son elementos culturales que, una vez que se afianzan, se agarran como una garrapata a las costumbres sociales y no se despegan ni con el mejor antiparasitario.

Los símbolos afianzados en el mundo femenino dependen de por donde sale o se pone el sol. Así, en oriente impera el símbolo del velo y como todo lo cubre, no da lugar a más simbología secundaria. La mujer es invisible para la sociedad, sólo en su casa puede dejar de ser un bulto. En occidente prevalece la bata de boatiné(1), que también es de naturaleza envolvente y aunque se emplea como excusa para combatir el frío, su uso denota una condición de mujer hogareña. Al contrario del velo que oculta del mundo exterior, la bata de boatiné se centra en cubrir las formas dentro del hogar. Existen excepciones en ciertas zonas rurales en las que este símbolo también se utiliza a la intemperie, generalmente cuando se visita a vecinas o familiares.

La calidad y sofisticación de la bata de boatiné varía en función del entorno rural o urbanita así como de la condición social de la mujer. En las magníficas tiendas de lencería del señorial barrio de Salamanca es posible ver en los escaparates modelos camuflados de rasos guateados de colores pastel. En los mercadillos se pueden adquirir estas prendas sin ningún disfraz, con estampados en vivos colores. Hay por tanto una oferta que cubre todos los segmentos de la escala social.

La bata de boatiné no llega a eclipsar a otros símbolos secundarios que no compiten con ella, sino que la complementan. Uno de ellos es el carrito de la compra , evolución de la cesta a la que se le añaden ruedas para su más fácil transporte por la mujer cuando alcanza una edad madura. Esta simbología secundaria tiene un comportamiento diferenciado en las mujeres de mayor poder adquisitivo que, aunque sean propietarias del símbolo, lo delegan en la asistenta. Están por tanto liberadas de este San Benito.

¿Por qué persisten estos símbolos a día de hoy? Una mujer que se precie de evolucionada debería rechazar esta simbología que la liga a la vida casera falta de alicientes. Nos llevamos las manos a la cabeza por el velo islámico mientras que nos colocamos una bata de boatiné nada más llegar a casa. Miramos con lástima a los homeless que arrastran un carrito con sus enseres y no nos damos cuenta de la pena que damos con nuestro carrito de la compra.

La solución no va por acercar posiciones con los hombres, cayendo en manos del chándal, en esto la paridad es perniciosa. Debemos cultivar nuevos símbolos que representen a la libertad, la sabiduría, la audacia, el glamour, pero los diseñadores aún no han percibido nuestras necesidades.

(1) Bata acolchada de estar por casa, vean una muestra de Canal nostalgia. Esta prenda fue el origen de la fortuna de los dueños de Zara, de la bata de boatiné a las prendas de usar y tirar. Este empresario siempre ha sabido anticiparse a los tiempos.

Sección-Reflexiones
technorati ,


¡¡Ni me menees!!

20 comentarios:

Zifnab dijo...

Fantásticas batas. No muy sexys las cosas como son, pero si muy evocadoras. Yo creo que la solución pasa por hacer vuestros propios símbolos sean los que sean y olvidar los que durante tanto tiempo os impusimos.

Todo esto como excusa para desearte que seas feliz una y dos veces y tres y cuatro e incluso, me atrevería con cinco

:-D

Espero que todo vaya en condiciones

Julen Iturbe-Ormaetxe dijo...

Desde luego que este tipo de "cutresímbolos" siguen estando a la orden del día, pero más importante es la persona que tira del carro o viste la bata por dentro. Mejor nos vamos despojando de los prejuicios. En cierta ocasión pude ver a Mario Vargas Llosa con un chándal que me dejó planchado para una temporada y socavó los cimientos de mi gusto por la forma en que escribía. Pero, claro, eran cosas distintas. Mejor miramos a la gente por lo que lleva dentro y no tanto lo que enseña por fuera.
Reconociendo que esto último es fácil decirlo y no tanto hacerlo, estoy contigo, Lula, carritos y batas no hacen avanzar en la dirección correcta... aunque también creo que llegan a generar un cierto enternecimiento, ¿no?

cerise dijo...

Tienes razón, las batas y el carrito forman parte de muchas casas...
Sere rarita...siempre he odiado estas batas y por supuesto los carritos...
Mi bata es una viejo chaqueton de lana que me regalo un marinero hace ...uffffff muchos muchos años y mi carrito ...una gran cesta de mimbre...
Ya se no es nada feminino..pero me siento bien asi...

Anónimo dijo...

A mi lo de tirar del carrito me parece una tontería si lo comparo con esos rulos que se ponían las señoras en la cabeza, e incluso dormían con ellos. ¡Menudo martirio! Ese sí que era el complemento insustituible de la bata de boatiné.

Yo para estar en casa tengo, si es invierno, prendas tipo chandal, y si es verano unas chilabas (masculinas) muy finitas que me compré en un mercadillo de Bagdad hace un montón de años. Aunque llegan hasta el tobillo son bastante fresquitas y muy cómodas.

Muxfin dijo...

Opino como Julen que lo importante es el interior de las personas.
¿Quién está más influenciado por estos símbolos? la persona que los lleva y no es consciente, o quien se fija en ellos.
Creo que a diferencia del velo que nace de una imposición cultural, la bata boatiné y el carrito corresponde más a un perfil de mujer sin calefacción central, sin coche para desplazarse y/o el mercado a unos 500 mts. de distancia, que a una simbología.
De acuerdo, no es el tipo de mujer que aspiramos, pero creo que se merecen nuestro respeto y nuestra ayuda.
Un tirador de carritos.

Anónimo dijo...

Y que me dices del rulo, eh??. De los masculinos, hablamos otro dia :P

Lula Towanda dijo...

Zifnab: Aunque como buen mago te guste la ropa holgada y hasta los piés, like la bata de boatine, y aunque te recuerde tantas cosas, no creo que sea las más apropiada para despertar pasiones. Gracias por desearme que sea feliz, me estoy ayudando con un gin-tonic en este momento. Tal vez escriba las causas, pero no será para reir...

Julen Lo que se ve por fuera es la punta del iceberg, por muy interesante que sea lo que esconde bajo el agua, las cosas casposas y cutres son un lastre, llenan de moho y no dejan desarrollarse bien. Evitarlas es una cuestión de higiene mental. No estoy de acuerdo con enternecerse con el mal gusto ¿te enternece Isabel II?.


cerise Por lo que te había leído te tenía identificada como anticarrito y me dije, una de las mías. Podíamos crear una campaña anticarrito en la blogesfera, aunque los que se pasan en día pegados al ordenador no suelen ir al mercado ni con carrito, ni con cesta de mimbre, ni en coche, simplemente no van.
Si un marinero me hubiera regalado un chaquetón de lana, no dudaría en ponérmelo. ¿Era gallardo y altanero? ¿era más rubio que la miel? ¿llevaba el brazo tatuado con un nombre de mujer?

Kotinussa Tenia metido los rulos como símbolo pero no sabía que hacer con ellos en las conclusiones. Al final lo censuré por falta de simetría en el relato y es que no puedo dar puntada sin hilo y me desquicio si todo no cuadra. Tal vez los rulos den para un relato sobre el cilicio capilar.
A mi hija la erudita le traje una chilaba de Marrakech y es su prenda favorita de estar por casa, a mi no me termina de convencer pero reconozco que tiene su comodidad, que los árabes de esto saben bastante.


Muxfin Por supuesto que lo que importa es el interior. Es lamentable y bastante incómodo vivir en una casa sin calefacción y tener que ir a patita al mercado. Si se asume lo cutre como algo inevitable a tu condición y no se lucha por salir de ella, es realmente desalentador. El intentar apartarse de lo cutre no implica tener un poder adquisitivo, sino cultivar el buen gusto. Ejemplo de mal gusto, como le comentaba a Julen, es la familiar real Británica y no será por falta de dinero.
Respecto al carrito, ¿no me digas que tu eres de esos caballeros que veo en el mercado que han caído en sus garras? Yo tuve un carrito cuando era muy joven, pero me odiaba a mi misma cuando veía mi imagen reflejada en los cristales de los comercios. Me dije, a Dios pongo por testigo que esto se tiene que terminar y se terminó con gran esfuerzo por mi parte ya que empecé a llevar las bolsas a pulso. Ahora, más aburguesada (y más mayor), voy en coche al mercado y me llevo a algún hijo para darle la oportunidad de colaborar.

aitor El rulo es complemento de la bata de boatiné, y como le digo a Kotinussa lo quité del post porque no sabía que hacer con ellos. Tal vez merezcan un post aparte. Respecto a los símbolos masculinos vengo desde hace mucho tiempo dándole vueltas a la cabeza el escribir algo sobre "El traje café con leche" alter ego masculino de la bata de boatiné.

vitalidad dijo...

Yo sí tengo carro, me quedé sin coche durante un año y era imposible hacer la compra, así que me compré uno. No veo que sea símbolo de nada malo. Mi hija odia ir con el carro, por lo que tú dices.

Me acostumbré a ir al mercado cercano y me gusta más que los supermercados. Más peligroso me parece el carro de los hipermercados. Metes lo que no quieres meter. En mi carrito no me cabe mucho, no puedo hacer las compras monumentales que hacía antes en el hiper.

Reconozco que no es muy fashion, yo no voy de ligue con el carrito.

¿Qué problema le ves al chandal? Me encanta, no quiero sentirme apretada por ningún sitio. Me liberé y no uso sujetador, no me apetece ir metiendo barriga, quiero ir cómoda.

Muxfin dijo...

Pues sí, y no me arrepiento. Cuando tengo que decidir entre la estética y lo práctico, me decido por lo último.
Incluso llevo mis aparatos de trabajo en un troley con el portátil y el resto de herramientas (30 Kg. de peso).

Antonio Latorre Jimenez dijo...

Excelente post, nunca me había planteado antes este punto de vista, comparar el velo musulman con el habito de ama de casa es una visión esclarecedora.
Podríamos añadir para seguir con la misma linea de pensamiento y recordando la ilustración del canal nostalgia, la imagen del hombre de la casa con su batín corto anudado a la cintura.
Es un habito para descansar, parar leer el periodico mientras se fuma un cigarrito sentado en su sillon de orejas preferido, que entrañable, mientras ella prepara la cena él se culturiza, se pone al día, como debe ser¿no es cierto?

Lula Towanda dijo...

Virginia Es cuestión de manías, lo del carro me supera y si no tuviera coche (que al paso que andamos con el actual alcalde vamos camino de ello) ya vería como me las maravillaría yo. Se me ocurre en la línea de cada palo aguante su vela ir toda la familia al mercado y distribuir las bolsas entre todos. Me parece mas justo que tener que caer en manos del carrito, que a fin de cuentas es cargar todo el peso de la compra en una persona.
El chándal es una prenda de deporte y como no hago deporte no la uso. Pero cada uno tiene sus cánones estéticos y si estás a gusto con él, pues úsalo.

Muxfin Ahí me has dado, ¡no soy una mujer práctica! Si he de elegir entre la estética y la práctico, escojo la estética. Es una manía de nacimiento.

Chisme Cotilla Te ha llegado la imagen del canal nostalgia, el modelo de familia de los tiempos de Franco. Aunque parece un chollo para el padre de familia, en su sillón orejero con su copita, su puro y su coñac, no deja de ser una estampa un tanto peligrosa porque tanta opresión en el ama de casa puede llevarla a poner un poquito de cianuro para el comodón del sillón. De esta manera ella gana dos cosas, el sillón y la pensión (¿será el caso de la viuda de tu escalera?). Es mejor la vida compartida en dos de una manera más justa.

Karolina dijo...

Ay! mi querida Lula, hay tantas cosas en este mundo que no tienen nada de estético pero nos hacen sentir taaan cómodas, que ningún avance de la moda dejará obsoleto.

CARMEN_R_PURAS dijo...

Pues yo este fin de semana que estuve en casa de mis padres, como pensaba que iba a hacer más calor, me llevé ropa bastante ligera, y la verdad es que al principio hacía frío.

Por la noche mi madre me sacó del fondo del armario una bata suya antigua de las de boatiné con los rombitos y estampada, y la mar de calentita que estuve.

No me da vergüenza confesarlo, ea, aunque ya sé que no es muy glamuroso.

Un beso.

la-de-marbella dijo...

Que bueno. Yo odio las batas con toda mi alma. Jamas al llegar a casa me pongo la bata, es más no consiento que lo hagan los mios. Debe ser alguna fijación rara de la niñez. Adoro el carrito de la compra, lo uso los sabados para ir andando al mercado y venir cargada cual bestia, si no lo tuviera tendría que ir con el coche, se perdería el encanto. Saludos Pd. Que lastima que no vinieras a Malaga, ¿que pasó?

Galufante dijo...

Lula, te puedes creer que no tenemos carrito de la compra en casa pero mi adorada esposa ha desencadenado una brutal cruzada a favor de adquirir uno???

Mear para no echar gota...

Agur

Lula Towanda dijo...

La Revolución de las Costillas Si algo te gusta, disfrutalo. Yo tengo mis manías y ni la comodidad puede con ellas.

CARMEN_R_PURAS En la casa de Cuenca hace un frío que pela y en los armarios siempre encuentras una colección de batas de boatiné de mi madre y hermana. Ellas se las ponen y me incitan a que me la ponga. Confieso que me han hecho la encerrona de tener que desayunar antes de ducharme (cosa que aborrezco, no me gusta desayunar en pijama) y en esos casos para no morir de frió he tirado de bata. No veas lo incómoda que me siento.

la-de-marbella Estamos a medias de acuerdo. Tanto la bata como el carrito son cómodos pero debe ser que busco la incomodidad.
Lo de Málaga da para dos post o más, pero aun me sangran la heridas para escribirlo...

Galufante Mucho me temo que tu esposa ganará la batalla o tendrás que ir a la compra tu solito. Le puedes dar a leer el post, pero como verás hay bastantes argumentos positivos para el carrito.

chousas dijo...

Pues que yo sepa nadie excepto mi abuela (y casi que prefiere una chaqueta de punto)lleva esas batas.

A los símbolos se les puede dar una nueva visión ¿no? No ponerse esa bata porque es horrible pues pase, pero si te gusta ponértela no creo que sea malo.
Aún recuerdo la cara de sorpresa de algunos en el British Museum al ver cruces gamadas en vasijas antiguas (¿Serían nazis los asirios? XD).

Espero que algún día no os haga falta pensar en la posible simbología de una prenda de vestir. Querrá decir que las cosas han vuelto a su curso.

Unknown dijo...

Las mujeres modernas han modernizado sus simbolos.

Lula Towanda dijo...

Telemáco: Por muy moderno que sea este símbolo para la mujer, hay que aplicarle el dicho: "aunque la mona se vista de seda, moda se queda".
Me fastidia, pero he de reconocer que tienen su estética

Anónimo dijo...

Tal vez los carritos de la compra no sean muy "bonitos" pero gracias a ello cuando vamos a comprar no tenemos que cargar el peso y sentir las incómodas bolsas de plástico (que también son bastante antiesteticas por cierto, aun mas ya que con ellas vamos haciendo publicidad gratuita de todas las tiendas en las que compramos), sino que podemos limitarnos a tirar de ellos. Es un gran invento detras del cual no creo que se esconda ningun simbolo "machista" mas bien al contrario ya que nadie dice que tengan que usarlo exclusivamente mujeres. Simplemente lo usa quien va hacer la compra, si ese alguien es la mujer no es en absoluto culpa del carrito.
En cuanto a lo de usar coche en vez del carrito, os recuerdo a todos el problema llamado "agujero de la capa de ozono"... si no tienes pensado llenar el coche sino solo hacer la compra de la semana, es una tontería usarlo (uno de los simbolos mas comunes de la sociedad sedentaria).
En cuanto a la bata nunca las he usado porque me gustan más las chaquetas anchas "de andar por casa", pero lo de compararlas al velo islámico me parece una exageración. No solo porque el velo esta considerado en el mundo islámico como una obligacion, sino porque aun a pesar de no ser lo úlitmo en moda, las batas son comodísimas y muy prácticas en el invierno (tambien en casas con calefaccion si la apagas por la noche, porque tarda un buen rato en encenderse y empezar a calentar). Además recuerdo que su objetivo es la comodidad y no el hacernos sentir mas bellas. No se lo que pensareis el resto, pero al menos yo cuando llego a casa después de trabajar todo el dia necesito ponerme algo cómodo y hasta ahora las prendas bonitas y a la moda no son precisamente muy comfortables que digamos...